Son un orden de bivalvos marinos con protobranquias y capa externa prismato-nacarada e interna homogénea. Es un grupo representado por muy pocos géneros, siendo Solemya el más destacable.
Solemya se caracteriza por tener valvas frágiles de forma esférica y sin charnela. La conchilla tiene un fino periostraco persistente que se extiende mas allá de los márgenes. Mantienen una relación simbiótica con bacterias quimiosintéticas. Estas bacterias, que proveen con su actividad metabólica de sustento al animal, habitan en las células de las branquias y producen energía oxidando el sulfato de hidrogeno, que posteriormente utilizan para fijar el dióxido de carbono a través del ciclo de Calvin.
Al ser un grupo tan poco común carecemos de ejemplares en nuestra colección.